Hoy, en la rosaleda había fiesta de néctar.
La fragancia delicada de las miles de rosas atraía a estos pequeños voladores,
que entraban y salían sin parar, de una rosa a otra.
Volaban al compás del batir de sus alitas transparentes
y en sus frágiles patitas portaban bolsas de polen.
Sony α100, Sigma 70-300 APO MACRO DG f/4-5.6
200 mm, 1/640 seg, f/5.6, ISO 100, flash n/a, sin trípode
© 2009 MayteVidal
Sony α100, Sigma 70-300 APO MACRO DG f/4-5.6
200 mm, 1/640 seg, f/5.6, ISO 100, flash n/a, sin trípode
© 2009 MayteVidal
muy buena estas fotos de la abeja en pleno vuelo, yo todavía no he conseguido conseguir esto, pero lo seguiré intentando, un abrazo y gracias por tu comentario
ResponderEliminarYo tenia ganas de ponerme a ello, pero siempre se me pasaba, hasta que el otro día, cogí la cámara y me fui expresamente a cazar bichos volando.
ResponderEliminarLa verdad es que volví contenta a casa ;)
Un abrazo!